De entre todas las posibilidades que ya son, te elijo a ti.
Toda la luz te rodea dejándote resplandeciente en un mar de energía.
Porque tú eres el amor, vienes a besarme, perfumada y limpia, cubierta de aromas celestiales. Me conmueves. No puedo hacer otra cosa que amarte. Alma, mi mitad, mi compañera.
Etiquetas: 57, amor, María del Carmen